El concejal del Partido Popular de Gijón Manuel Pecharromán abandonó ayer el comité de expertos encargado de seleccionar a la empresa que gestionará los festejos taurinos de El Bibio durante los próximos tres años. El edil basa su decisión en que «la oferta presentada por Carlos Zúñiga, que salvo sorpresa será la que probablemente salga elegida, no es la mejor» de las seis que se presentaron.
Pecharromán indicó que aunque la propuesta del último empresario es «buena», la oferta de Serolo, empresa que gestiona plazas como las de Valencia y Puerto de Santa María, la supera en proyecto de comercialización, dinamización, difusión, gestión y publicidad, capítulo este último en el que prevé invertir 300.000 euros frente a los 50.000 destinados por Zúñiga. Sin embargo, el resto de integrantes del comité seleccionador desconfía de Serolo, según el edil popular, «por parecerles de difícil cumplimiento todo lo que presenta en su oferta». Además, añade, ha pesado en contra de esta firma que «se nota que aplicó el ‘corta y pega’ de otras ofertas» presentadas a otras ciudades españolas. A pesar de esta laguna, que para Pecharromán puede denotar falta de conocimiento de la plaza de toros de Gijón, el concejal del PP lo minimiza poniendo de relieve que «se muestran seguros de que pueden cumplir todo lo ofertado».
El hasta ahora representante de la oposición en el comité de expertos consideró que no le quedaba otro camino que actuar así por su disconformidad también con los pliegos del concurso y «las dudas y suspicacias»· que llevaron a la principal asociación de empresarios taurinos españoles a pedir públicamente que «se hiciera un esfuerzo especial para que saliera elegida la mejor oferta». El concejal explicó que el comité de expertos -del que ya no forma parte- pondera las ofertas con un máximo de 80 sobre 100, mientras que los 20 puntos restantes se los lleva la mejor oferta económica, cuyos sobres se abrirán el próximo martes. A partir de ahí la adjudicación podría hacerse efectiva en el plazo de un mes.
Además, pidió que en las próximas convocatorias taurinas (la concesión del coso de El Bibio es por tres años prorrogable a otros tres) el Ayuntamiento sea más cuidadoso, ya que no juzga correctos ni los pliegos ni la forma de puntuar.