(L. Palacios / La Nueva España) Llegaba anoche envuelto en su inevitable aura de seductor, y Arturo Fernández, agasajado por la Asociación de Mayores del PP local, soltó a modo de primer saludo un «sacadme guapo» bajo la lluvia de «flashes» fotográficos. Fue una entrada de estrella, con gaita y tambor como banda sonora, para recibir el aplauso y los cumplidos de cerca de un centenar de afiliados «populares» que este año han querido premiar al actor gijonés «por sus valores y trayectoria ejemplar».
Unos valores «de trabajo, esfuerzo y tesón» que le han valido la admiración general y la de David Medina, presidente del PP local, en particular, habida cuenta además de que se trataba de su primer acto público tras su reciente proclamación. «Es un orgullo para nosotros contar hoy aquí con una persona valiente, que nunca ha tenido complejo en expresar lo que opina a pesar de que a algunos sectarios no les gustara e intentaran arrinconarlo», apuntó Medina.
El artista gijonés, vendedor de corbatas y púgil en su juventud, ocupación esta última que le valió el apodo de «el tigre del Piles», salió de Gijón apenas cumplida la veintena con destino a Madrid, donde pasó de figurante a protagonista en pocos años «y siempre de manera autodidacta», como recordó Ángeles Fernández- Ahúja en su glosa. Poco podía pensar entonces aquel chaval que «hoy iba a estar aquí para recibir un galardón que me emociona porque me llega hasta el fondo del corazón». Y porque «me lo dan los míos», recalcó Arturo Fernández, «encantado de regresar a mi tierra, a esta Asturias que amo por encima de todas las cosas».
Un amor por el que se le reconoce fuera de la región; no en vano todos coincidieron ayer en señalar como una de las grandes virtudes del actor la de «hacer siempre bandera de la asturianía y el gijonesismo», relató la presidenta regional del Partido Popular. Mercedes Fernández no pudo reprimir un «ay mi madre Arturín» cuando se reencontró con «una persona a la que quiero mucho y desde hace mucho tiempo», al igual que a su esposa, Carmen Quesada, espectadora sonriente ayer durante todo el acto. «Qué guapo estás», incidió la presidenta en su intervención, antes de dar paso a las palabras de agradecimiento que el galán gijonés dedicó a los presentes. No sin antes reconocer que «mire donde mire esta noche no veo más que chatinas guapas».
Para todos los cargos del PP tuvo dedicatoria, especialmente para el presidente de la Asociación de Mayores, José Luis Valladares, y para Medina. «Un prometedor presidente del PP del mi Gijón del alma» al que instó a «recordar siempre» que «los asturianos estamos orgullosos hasta la médula de serlo, y vuestra tarea es ahora la de hacer mejor nuestra patria chica para ayudar a que también sea mejor nuestra patria grande». Palabra de un votante confeso del PP «porque es un gobierno serio y bien preparado».
Y el resto de la velada estuvo consagrada a las fotos, los besos y las alabanzas para el mayor dandi que ha dado la ciudad. Como él mismo resumió: «Y mira que yo hablo bien de mí; os habéis quedado cortos».