Ángeles Fernández-Ahúja, presidenta del Partido Popular de Gijón.
(R. Valle / La Nueva España) El PP local ha decidido dar el salto de los despachos de la Casa Consistorial a los buzones de los gijoneses en su campaña de reivindicación de una rebaja de los impuestos municipales a los que tendrán que enfrentarse los vecinos de la ciudad el año que viene, con especial referencia al Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI). Alrededor de 30.000 hogares recibirán estos días uno de los folletos que, bajo el lema «Menos impuestos, más economía» y con la premisa «de que el dinero donde mejor está es en el bolsillo del contribuyente», se han diseñado y repartido desde el PP de Gijón. La campaña se complementa con fórmulas de contacto directo con personal del partido en su sede de la calle de Álvarez Garaya y el uso de las redes sociales.
«Queremos dar a conocer a los gijoneses nuestro planteamiento de bajar los impuestos municipales y dar a conocer, también, lo que no ha querido hacer el gobierno de Foro en este tema», explicaba ayer la presidenta del PP, Ángeles Fernández-Ahúja. La líder popular achacaba a «la incapacidad negociadora del gobierno de Moriyón, porque quien está en el gobierno tiene un plus de responsabilidad en llegar a acuerdos», el hecho de que no se hubiera podido sacar adelante en el Pleno de las ordenanzas fiscales un planteamiento de reducción de los tipos impositivos del IBI y la plusvalía. La falta de acuerdo de los grupos motivó una prórroga de las ordenanzas fiscales ahora en vigor, lo que supone en el caso de ambos impuestos -donde el año que viene se pierden bonificaciones ahora vigentes- un incremento, respectivamente, del 7 y el 100%.
En el caso concreto del IBI, el PP denuncia en su folleto que el Ayuntamiento ha incrementado en los últimos años en un 45% sus ingresos por recaudación del IBI urbano, pasando de 41 millones en el año 2007 a los casi 61 previstos para este 2013 en curso. «El impuesto local más gravoso para los gijoneses ha aumentado su recaudación en 19,1 millones mientras los ciudadanos tenían que apretarse el cinturón. La negativa a reducir una Administración local sobredimensionada y unos valores catastrales irreales fruto de la burbuja inmobiliaria explican este aumento desmesurado», se denuncia desde el Partido Popular.
El PP llevó a Pleno una propuesta para rebajar el actual tipo impositivo del 0,48% al 0,42%. El equipo forista la rechazó de plano desde un primer momento al asegurar que suponía una pérdida de seis millones de euros en los ingresos que hacían peligrar la actividad municipal. Los populares defienden que su propuesta es viable para el Ayuntamiento y garantiza al contribuyente un ahorro de 60 euros por cada 100.000 euros de valor catastral de un inmueble. «Que no nos vendan la historia de que no se pueden bajar los impuestos. Es posible hacerlo sin lesionar servicios públicos esenciales. Pero si no hay voluntad política es imposible, les gusta recaudar», reprochaba Ahúja a Foro.
Los populares siguen adelante en su lucha por la rebaja del tipo impositivo del IBI. Al tiempo piden una reducción del 30 al 15% del tipo de la plusvalía con una bonificación del 95% para las transmisiones referidas a la vivienda habitual por causa de fallecimiento y una bonificación del 35% del IAE para empresas que mantengan o generen nueva actividad económica.
La divergencia en la política impositiva es uno de los elementos de fricción entre PP y Foro de cara a la negociación de los presupuestos del año que viene. Otro es el incumplimiento, en opinión de los populares, de los compromisos adquiridos por el gobierno forista con el PP a cambio de su apoyo en las cuentas del actual ejercicio. El PP no parece muy contento con el acelerón de Foro a dos meses de finalizar el curso a proyectos como la fusión de empresas municipales o la puesta en marcha del Sumgi social. «En una negociación política debe haber seriedad y lealtad, y aquí no la hay. Foro se hace trampas al solitario y en el PP no somos títeres de nadie», sentenciaba Ahúja.
