El Partido Popular culpó ayer al gobierno local de «imponer el remate final» a muchos negocios de la avenida de Castilla por la «mala planificación de las obras» que se llevan a cabo en esta avenida y que está previsto que finalicen a mediados del año que viene.
El concejal popular Manuel Pecharromán afirmó que los constantes apagones del alumbrado público denunciados recientemente por varios comerciantes son «una muestra más de la pésima ejecución» de los trabajos y aseguró que «muchos peatones han sufrido accidentes» por la mala señalización de las zanjas y por la falta de luz durante la noche. «Para hacer así las obras es mejor no hacerlas, porque al final van a provocar más perjuicio que beneficio», apuntó el concejal.
«Nos preocupa mucho el malestar creciente que percibimos entre los comerciantes y los vecinos de la avenida de Castilla por la marcha de la remodelación» de esta arteria, señaló Pecharromán. «Estamos hablando de una reforma que se está haciendo francamente mal y que, además, supondrá una actuación ruinosa para la administración», añadió, «muy en la línea de todo lo que ha hecho en los últimos años el Partido Socialista».
Por eso, solicitó que «se solucione de inmediato el problema de los apagones, para lo que es necesario que los operarios municipales reciban las instrucciones precisas y se pongan a trabajar». Aun así, el edil popular insistió en calificar de «desastre» la reforma en curso de este céntrico bulevar comercial. «Muchas familias se van a arruinar por la pésima planificación del gobierno local y eso no se puede permitir», concluyó el edil Manuel Pecharromán.
