Crear empleo y prestar mejores servicios públicos. Con ese doble objetivo el Gobierno del Partido Popular ha anunciado que aquellos ayuntamientos españoles que tengan remanente positivo de tesorería presupuestario, como es el caso de Gijón, podrán invertirlo en la mejora de su municipio. Esto es, que el dinero previsto en los presupuestos locales que no se haya empleado o gastado en 2012, podrá dedicarse ahora a proyectos o iniciativas que beneficien a sus ciudadanos.
La medida es fruto de la especial sensibilidad del Ejecutivo de Mariano Rajoy ante la compleja situación que viven algunos ayuntamientos de nuestro país, debido a su maltrecha economía. Esta decisión del Partido Popular, anunciada por el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, supone un cambio sustancial para las entidades locales. Hasta la fecha los ayuntamientos debían dedicar el superávit, caso de que lo tuvieran, al pago de la línea de crédito que les concedió el Gobierno español, esto es, a la amortización de su deuda. A partir de ahora se abre la posibilidad de dedicar este remanente presupuestario a otros fines.
Una vez que se conozca la cuantía del superávit en Gijón, el Partido Popular valorará aquellas iniciativas susceptibles de generar empleo y, de este modo, reactivar la economía local.
En una coyuntura económica como el actual, es de apreciar el gesto del Gobierno de Rajoy, en la medida que representa un importante espaldarazo a la Administración Local. En esa misma política se enmarca otra de las medidas anunciadas por el Ejecutivo, consistente en la puesta en marcha, durante este año, de un segundo Plan de Pago a Proveedores, a fin de favorecer la liquidez de las comunidades autónomas y ayuntamientos. El objetivo en esta ocasión estará íntimamente ligado al cumplimiento de la directiva de morosidad, que obliga a pagar a proveedores en menos de 30 días. El Partido Popular se ha propuesto que España vuelva a ser un país serio, y un país serio no puede permitirse no pagar sus deudas.
Este nuevo Plan viene a reforzar el Fondo de Pago a Proveedores puesto en marcha por el Gobierno popular en 2012, que ascendió a 30.000 millones de euros, siendo sus consecuencias macroeconómicas relevantes, en cuanto a que supone una importante ayuda a la creación de empleo y una inyección de liquidez a la economía real equivalente a un 3% del PIB.
El Fondo de Pago a Proveedores es la operación de refinanciación más importante de la historia de España. Ha sido concebido para salvar el empleo de autónomos y de pequeñas y medianas empresas. Se trata de que los autónomos no pierdan su empleo y las empresas no cierren sus puertas por el hecho de que los ayuntamientos no paguen sus deudas.
Además, el plan ayuda a sanear en parte la maltrecha situación económica y financiera de nuestros ayuntamientos y comunidades autónomas, y a impulsar la actividad empresarial. También contribuye a la transparencia de las cuentas públicas, a terminar con el déficit oculto y a imposibilitar que se repita la existencia de facturas en los cajones.
Con estos planes y medidas, el Gobierno de Mariano Rajoy demuestra su compromiso con las comunidades autónomas y ayuntamientos, con el tejido empresarial de este país y, en definitiva, con la reactivación económica. (Artículo publicado por EL COMERCIO).
Ángeles Fernández-Ahúja
Presidenta del Partido Popular de Gijón y diputada nacional