
Manuel Pecharromán, portavoz del Grupo Popular.
Tras conocerse el informe de la Unidad de Delitos Económicos de la Policía que vincula a Francisco Álvarez-Cascos con la «trama Gürtel» como presunto beneficiario del cobro de comisiones, el portavoz del Grupo Popular, Manuel Pecharromán, defendía el respeto a las decisiones judiciales y a las investigaciones policiales y la necesidad de depurar todas las responsabilidades en este tipo de casos.
Manuel Pecharromán afirmó que «Cascos y Foro parecen estar siempre por encima del bien y del mal» cuando la ley se fija en ellos. Una reflexión con especial sentido en Gijón, donde el pasado miércoles un juez imponía a la Alcaldesa repetir un Pleno que ella había suspendido en julio tras ser convocado reglamento en mano por la oposición. El juez dictaminaba en su sentencia que la decisión de Moriyón vulneraba el principio constitucional de participación política de los concejales. Y para establecer el vínculo entre el hacer de Cascos y la fórmula de trabajo del equipo de Moriyón, Pecharromán jugaba con la frase del propio presidente de Foro Asturias en la que aseguraba que «pedir que demuestre mi inocencia es como pedir que demuestre que no he estado en Afganistán entrenando yihadistas. «Cascos no habrá entrenado yihadistas, pero sí entrenó a Moriyón», aseguró.