
José Luis Pérez y Manuel Pecharromán, durante la rueda de prensa.
La planificación educativa del área de Roces, donde se construyen 4.000 viviendas, y donde próximamente se prevé la llegada de nuevos residentes, es una cuestión que preocupa en las filas del Partido Popular de Gijón, que ha vuelto a reivindicar por boca del concejal Manuel Pecharromán la construcción de un colegio en el nuevo barrio urbano. «Al final los niños tendrán que ir a otros centros y Roces no puede quedarse como la ciudad del Pocero», subrayó el edil, quien repasó junto al presidente de la comisión de educación del PP en Gijón, José Luis Pérez, el estado de la red educativa local. «Arrancamos el curso con idénticos problemas que el año pasado», advirtieron.
A las infraestructuras pendientes en Roces, sumaron la «desastrosa» planificación de la red de Educación Infantil, donde, a su juicio, «da la sensación de que el Ayuntamiento juega a las casitas como si fuera un Monopoly, construyendo y destruyendo, como la de Monteana, que quedó sin alumnos a los 4 años de abrir».
La principal crítica de los populares tiene que ver con los recortes efectuados por la Consejería de Educación y que, a su juicio, afectarán al trabajo diario de los profesores. «Los maestros y educadores tendrán que trabajar más pero con menos medios», señaló Pecharromán. Entre otros problemas, citó la reducción del presupuesto para gastos de funcionamiento, lo que ha conllevado «que no haya dinero ni para fotocopias». Asimismo, criticó que «muchos alumnos han comenzado el curso sin libros» por el recorte del gasto autonómico para las ayudas a la compra de libros.
La «precaria» situación de los docentes en el ciclo de 0 a 3 años se repite, según los populares, también en Primaria, «donde han iniciado el curso trabajando más con menos medios». De hecho, Pecharromán lamentó que algunos alumnos se encuentren todavía «sin libros, ni material escolar, ni fotocopias», cuando «en un momento de crisis debería potenciarse todo lo educativo».