“Tenemos que comenzar por nosotros y dar ejemplo en esta situación de crisis que vivimos”. Por ello, el concejal del Grupo Popular Gabriel Díaz propuso reducir un 10% las subvenciones a grupos políticos, pero también a organizaciones sindicales, empresariales y todas aquellas ayudas «electoralistas» que otorga el Ayuntamiento de Gijón, a través de su capítulo 4 del presupuesto municipal. De esta forma se conseguiría ahorrar cerca de 6,5 millones de euros, que se podrían destinar, “sin intermediarios”, a la creación y mantenimiento de empleo.
Gabriel Díaz consideró que el gobierno municipal debe “apretase el cinturón” y dejar de emplear “muchos dineros indebidamente» en subvenciones a «amigos y afines del Ayuntamiento». El concejal popular apostó por rebajar las aportaciones a grupos políticos, instituciones con participación municipal como la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y la Federación Asturiana de Concejos (FACC), gastos «electoralistas más que sociales» en empresas municipales y a sindicatos y asociaciones empresariales.
Por el contrario, no se tocaría de ese capítulo del presupuesto las partidas «ya mermadas», como becas de estudio, ayudas a la investigación, apoyo a asociaciones de vecinos, a Protección Civil, ayudas sociales, intercambio de libros, banda de música o actividades deportivas.
Asimismo, Gabriel Díaz insistió en que de los 64 millones de euros se ahorraría un 10 por ciento, es decir, casi 6,5 millones que darían margen suficiente de actuación para destinar dinero a servicios esenciales con el objetivo de crear y mantener empleo, para dejar de ver, entre otras cosas, “carteles de se vende, se traspasa o se alquila”. “Hay que recortar los gastos superfluos, aunque sean los más queridos para el PSOE”, concluyó el concejal popular.