Tranquila, pero contundente. Así se mostró hoy la diputada del Partido Popular por Asturias y presidenta del PP de Gijón, Pilar Fernández Pardo, durante su interpelación en el Pleno del Congreso al ministro de Fomento, José Blanco.
Fernández Pardo fue la encargada de presentar la interpelación urgente del Grupo Parlamentario Popular relativa a las obras de ampliación del puerto de El Musel, para que el Gobierno aclare las circunstancias que han causado el sobrecoste de las obras y su consiguiente ralentización, así como los mecanismos que se han previsto para solucionar esta situación.
El ministro de Fomento eludió responder a las preguntas de la diputada del Partido Popular, que insistió en que debe abrirse una investigación y deben depurarse responsabilidades ante este escandaloso sobrecoste.
Blanco se limitó a afirmar que las obras de ampliación del puerto gijonés estarán terminadas para el año próximo, al tiempo que recalcó que el Gobierno de España «no mira para otro lado» porque tiene interés en encontrar soluciones al «problema económico» provocado por el incremento de costes -de 251 millones de euros- de las obras.
En esta línea, apuntó que el «interés de Asturias, de España y el interés general aconsejaban acabar la obra «lo antes posible». Agregó que Fomento «se ha esforzado en encontrar una solución que garantizara la continuidad de las obras, colaborando con Asturias y la Autoridad Portuaria», y puntualizó que la Autoridad Portuaria es la competente en la gestión de los puertos, de modo que «esto no es competencia de Fomento ni del Gobierno de España».
Acerca del incremento de los costes, explicó que está motivado por el aumento de costes del material de cantera empleado, que resulta más caro por la «imposibilidad de traerlo desde la mina prevista inicialmente, cercana a la obra». «El mayor coste de material, unido al gran volumen necesario para la ejecución de las obras, es la principal causa del incremento, y a esto hay que añadir mejoras técnicas y los efectos que tuvieron sobre las obras los temporales de 2006 y 2007, que provocaron la necesidad de efectuar reparaciones que no se reflejaban como es lógico en el presupuesto inicial», expuso.
Pilar Fernández Pardo pidió al ministro que no fuera «prepotente» y le dijo que «en mentiras es un catedrático». Denunció las «irregularidades cometidas y que han generado el sobre coste», le recordó a Blanco que él es el último responsable «de todo lo que ocurra» y pidió que se facilite al PP toda la documentación para estudiar esas supuestas irregularidades.
Fernández Pardo recalcó la necesidad de Gijón de poder contar con un puerto competitivo y denunció esos 251 millones de euros de sobre coste, «lo que eleva el presupuesto en un 43 por ciento, hasta 800 millones». Además, aseguró que la UE «ha retirado los fondos y se ha iniciado una investigación, pero hoy por hoy la oficina antifraude de la UE está estudiando el tema».
«Ese sobre coste tendremos que afrontarlo los asturianos por la negligencia de unos pocos. Pero esos pocos, muy tranquilos, están todos en las filas del PSOE. Tendrá que recurrirse a un nuevo crédito, a pesar de que tenía ya su capacidad crediticia casi al límite. Es una escandalosa desviación presupuestaria, pero nadie asume responsabilidades, ni dimisiones, ni ceses por un sobre coste de 251 millones», argumentó Fernández Pardo.
Asimismo, lamentó que las autoridades autonómicas y los responsables de Fomento usen el «tuya, mía, cabecina y gol» para eludir sus responsabilidades y culparse unos a otros de este sobre coste. Insistió en que la UE va a retirar sus fondos debido a que «el modificado y las irregularidades cometidas no tienen el apoyo de la UE, algo que se va a sufrir cuando lleguen los informes, y el Gobierno de España será responsable de todo lo ocurrido».
El ministro reiteró que ha trabajado para encontrar una solución económica «adecuada», y explicó que para esta solución Puertos del Estado otorgará a la Autoridad Portuaria un préstamo de 215 millones que será reembolsado por aquella en un periodo de 37 años. Matizó que esto «no lo van a pagar los asturianos», como aseguró la diputada del PP, «sino quienes utilicen el puerto».
En su réplica, la diputada popular preguntó a Blanco si se estaba refiriendo a que habrá que subir las tarifas del puerto, que ya arrastra una importantísima reducción de los tráficos. El ministro no respondió a este punto.