(R. Valle / La Nueva España) El portavoz del Grupo Municipal Popular, Manuel Pecharromán, solicitó ayer formalmente por escrito a la Alcaldesa, Carmen Moriyón, que limite al mínimo la participación de su edil de Hacienda, Alejandro Roces, en las comisiones municipales ante sus reiterados insultos a concejales de otros grupos políticos y por hacer gala «de un comportamiento carente de la educación básica y el respeto mínimo exigible» en todo debate político. «Teniendo en cuenta las negativas consecuencias que acarrea esta actitud, inaceptable por parte de un representante público, solicitamos que consideres formalmente sustituir a Alejandro Roces en las comisiones municipales en las que participa, bien como vocal o como suplente, y limitar su presencia a la de Hacienda, cuyas competencias aún mantiene delegadas», le pide en su misiva Pecharromán a Moriyón. Roces preside las comisiones de Hacienda, Reglamentos y Cuentas, es vocal en Urbanismo y suplente habitual en las sesiones de Políticas Integrales.
La contundente carta de Pecharromán tenía como antecedente el «desagradable» y «violento» incidente, según testigos presenciales, protagonizado por Roces unas horas antes en la Comisión de Reglamentos y Sugerencias y que tuvo como destinatario al edil popular Francisco Rodríguez Cubiella. Roces, que asistía a la reunión en sustitución de un compañero, se enfrentó a Cubiella cuando éste ironizó sobre el comentario que, en la comisión de Reglamentos del día anterior, le había hecho el edil de Hacienda sugiriendo que acosaba con sus exigencias a la vicesecretaria del Ayuntamiento. La comisión debatía una propuesta del PSOE para modificar la normativa municipal en materia de publicidad, que contaba con el apoyo de toda la oposición y que Roces intentaba frenar alegando la falta de un informe solicitado por la Alcaldesa. Al final la oposición sacó adelante la propuesta.
«No todos los días me llaman acosador», indicó Cubiella a Roces al inicio de la sesión de ayer cuando volvieron a verse las caras. El comentario del popular hizo saltar del asiento al edil forista que, según testigos, se encaró con Cubiella mientras le exigía que retirase ese comentario y le acusaba de mentiroso, imbécil y sinvergüenza. «Se puso como loco», aseguran algunos ediles. Tras unos minutos de tensión, Roces se fue de la sala de reuniones dando un portazo y sin escuchar los llamamientos a la calma de su compañero de grupo municipal, y presidente de la comisión, Pedro Barbillo. La reunión se desarrolló sin él.
Para el PP, los comentarios dirigidos por Roces a su edil en estas comisiones -que al contrario que el Pleno son privadas- no son más que la gota que desborda el vaso de los habituales desplantes, insultos y faltas de respeto del edil de Hacienda. «La verdad es que decirnos no tenéis ni idea y sois unos ignorantes es lo más habitual», explicaba ayer un munícipe al analizar el trato que suelen recibir de Roces en las comisiones. «Mentiroso» es otro adjetivo que muchos ediles aseguran haber recibido del forista. Desde todos los grupos municipales se coincide en el carácter vehemente, autoritario y tendente a la falta de respeto del edil de Foro y su capacidad para perder los papeles en momentos de tensión y pasar de la disputa política a la descalificación personal. Sin embargo, pocos son quienes recuerdan una situación tan desagradable vivida en una comisión de trabajo. Y menos en la de Reclamaciones, que simplemente hace un repaso a los escritos que se reciben de la ciudadanía con quejas, sugerencias o peticiones.
Los populares, y ése es el argumento que usan en su petición a la Alcaldesa, consideran que Roces incumple el artículo 10 del Reglamento orgánico de funcionamiento del Pleno del Ayuntamiento, que obliga a los concejales a «observar la cortesía debida». Roces no es el primer edil de Foro Asturias al que se afea su comportamiento personal. Su compañero Carlos Rubiera fue reprobado hace unas semanas por el Pleno, a petición del Grupo Municipal de IU-Los Verdes, tras hacer unas declaraciones públicas llamando «botarate» y «lenguatero» al portavoz de IU, Jorge Espina, y «mamporrero» al socialista Justo Vilabrille. Incluso la alcaldesa mostró en público su malestar por los comentarios de Rubiera.
De Roces ya se había pedido hace un tiempo su cese. En esa ocasión por su mala gestión en la contratación de un seguro que avalaba actuaciones delictivas y por las irregularidades en proceso de selección de personal. Ahora se le acusa también de falta de educación.
La carta
Estimada Alcaldesa:
Ante los insultos proferidos por Aejandro Roces hacia diversos concejales, entre ellos el edil de nuestro Grupo Municipal Francisco Rodríguez Cubiella, en la Comisión de Reglamentos, celebrada ayer, y en la de Sugerencias y Reclamaciones, que ha tenido lugar esta misma mañana, y de las que suponemos hayas sido informada, resulta evidente que el concejal de Hacienda ha incumplido reiteradamente el artículo 10 del reglamento orgánico de funcionamiento del Pleno del Ayuntamiento de Gijón, que obliga a los concejales a «observar la cortesía debida».
El comportamiento de Alejandro Roces carece de la educación básica y el respeto mínimo exigible en todo debate político y enturbia de forma grave el normal funcionamiento de las comisiones municipales.
Teniendo en cuenta las negativas consecuencias que acarrea esta actitud, inaceptable por parte de un representante público, solicitamos que consideres formalmente sustituir a Alejandro Roces en las comisiones municipales en las que participa, bien como vocal o como suplente, y limitar su presencia a la de Hacienda, cuyas competencias aún mantiene delegadas.
Cordialmente,
Manuel Pecharromán Sánchez
Portavoz del Grupo Municipal Popular