(R. VALLE / LA NUEVA ESPAÑA) Al PP gijonés parece írsele menguando la dosis de paciencia en el trato con el gobierno local de Foro Asturias. Y su malestar no sólo tiene que ver con «la lentitud, escaso dinamismo y evidente falta de voluntad» del equipo de Carmen Moriyón por sacar adelante las iniciativas populares pactadas en la negociación de los presupuestos municipales, como ayer denunciaban tanto la líder de la gestora del PP gijonés, Ángeles Fernández-Ahuja, como el portavoz del Grupo municipal Popular, Manuel Pecharromán. Tampoco ayudan mucho los últimos comentarios de la Alcaldesa. «Sin entrar al fondo del asunto, me parece una frase desacertada, desafortunada y un poco irrespetuosa con los afiliados del Partido Popular», sentenciaba ayer Ahuja en referencia al comentario de Moriyón, que, para reivindicar un juego político exento de insultos y descalificaciones, aseguró que «yo no me voy a poner en la plaza a decir por qué no abortó la madre de Rajoy». «Si hablamos de descalificaciones podemos ir a las hemerotecas. La Alcaldesa no está precisamente inmaculada en este aspecto», remató Pecharromán.
Así las cosas, los dirigentes populares se colocaron en el listado de colectivos gijoneses afectados por las incorrecciones de Moriyón y alguno de sus compañeros en el gobierno local. «Aunque dice que no insulta ni descalifica, ojo a las frases que ella y su equipo vierten de vez en cuando. Ellos han sido los que han generado malestar con los mineros, los sindicatos, los hosteleros, los constructores, los madereros… Ellos, no el PP», indicó el portavoz municipal popular, a quien la propia Moriyón le había afeado que usará términos como «malas porteras» o «pirómanos» para referirse a representantes del gobierno municipal de FAC.
Las discrepancias de los dirigentes del PP con Foro van más allá de decidir quién recurre más a la política del insulto y la descalificación. Ahuja y Pecharromán tampoco coinciden con Moriyón en ver normalidad en el seguimiento de los acuerdos pactados entre ambas formaciones dentro y fuera del presupuesto. «Que este pacto esté o no esté en peligro depende del gobierno de Foro Asturias. El PP está dando muestras de una gran generosidad en favor del interés general de los ciudadanos, y frente a esa generosidad hay una escasa voluntad de Foro por cumplir esas premisas», sentenció Fernández-Ahuja, que no quiso adelantar ninguna jugada política del PP local que suponga una ruptura total de su relación con el gobierno local de Foro. «Agradezco a todos la preocupación por el PP, pero es el PP quien marca sus tiempos y sus estrategias. Somos un partido fuerte, sólido, firme, exento de personalismos y caducidad y que no renuncia a su identidad», indicó Ahuja, al tiempo que abogaba por el «paso a paso, día a día. No precipitemos los acontecimientos».
Pecharromán, por su parte, reivindicó que el PP «es un partido de palabra. Hemos cumplido todos los acuerdos a los que hemos llegado y vamos a seguir haciéndolo». Otra cosa es ver si hay capacidad para alcanzar nuevos acuerdos con el equipo de Carmen Moriyón mientras se suman incumplimientos a lo ya pactado.
Entre esos incumplimientos, Pecharromán enumeraba ayer la elección «a dedo» del equipo directivo del plan «Gijón inserta», la ausencia de una reestructuración importante en el modelo socialista de organización del Ayuntamiento y las empresas municipales, el poco ahondamiento en acciones de austeridad municipal, el plan municipal de drogas, la ausencia de explicaciones sobre «facturas falsas» en Emulsa, el Servicio de Urgencias Municipal de Gijón (Sumgi) y el IBI social. Sobre estos dos últimos proyectos, el PP está abierto a un nuevo debate ante los problemas técnicos y legales que puedan existir para hacerlos factibles. Igual que hay interés del PP por sacar adelante, con el mayor consenso político posible, un pacto municipal en favor de la reactivación económica de la ciudad, que cuenta con más de 30.000 parados en estos momentos.
Si no hay acuerdos por culpa de Foro Asturias, el PP se siente con las manos libres para defender sus proyectos para Gijón. «No somos muleta de nadie. Apoyaremos los que consideremos necesarios, venga de donde vengan, que nadie se rasgue las vestiduras», indicaba ayer Manuel Pecharromán. El edil, por ejemplo, adelantó que el PP no apoyará la aprobación definitiva de la ordenanza de terrazas hosteleras si antes no se llega a un consenso con el sector, ahora ampliamente enfrentado al Ayuntamiento. También se podría ejemplificar el desacuerdo del PP con Foro en las futuras modificaciones del presupuesto municipal. La última, presentada en el pasado Pleno, sólo consiguió la abstención del PP. «Queremos dejar claro que quien enturbia las relaciones es Foro, con la falta de cumplimiento de muchos acuerdos y determinadas descalificaciones», sentenció Pecharromán. Eso sí, el malestar con Foro no llevará al PP a jugadas que favorezcan el regreso del PSOE a la Alcaldía. «El PSOE es nuestro adversario natural y lo seguirá siendo», concretó Ahuja.