Robustiano Viña (LNE)
(R. Valle / La Nueva España) La junta rectora de la Fundación Municipal de Cultura ya ha dado el visto bueno y mañana hará lo propio la Junta de Gobierno. El Ayuntamiento busca darle una oportunidad de futuro al Centro de estimación artística «Litografía Viña « sacando a concurso su gestión a través de una concesión administrativa en la que se establece como tipo de licitación la cantidad de 600 euros anuales. «No queríamos que el dinero fuera un problema», explica el concejal popular Manuel Pecharromán, cuyo grupo político siempre ha mostrado un gran interés en este centro artístico ubicado en Cimavilla y que ya llevaba alrededor de un año sin actividad. Un centro de estampación artística creado en 2001 a partir de los fondos, casi mil piezas, que un año antes el Ayuntamiento había comprado de la antigua Litografía Viña como fórmula de protección de la memoria industrial de la ciudad.
Este centro artístico municipal de la calle Honesto Batalón es, pues, el heredero de la empresa que fundaran los hermanos Viña Mori, Robustiano y Juan, el 3 de agosto de 1920. Empezaban entonces ocho décadas de actividad laboral familiar donde tuvieron también su protagonismo Tano, Juan y Jaime Viña. El fallecimiento de Juan en octubre de 2010 fue el simbólico adiós de los Viña Mori. Pero queda su obra y su nombre en este centro de estampación cuyo pulso se busca recuperar para la vida cultural gijonesa.
El pliego de condiciones de la concesión, que se plantea con una vigencia de siete años prorrogables otros tres, impone al concesionario asegurar la prestación de servicios de estampación litográfica y calcográfico de artistas que lo demanden, la impartición continuada de cursos, atender demandas de proyectos tanto de instituciones públicas como privadas y realizar proyectos artísticos de propia creación e iniciativa con estas técnicas. También se plantea en el pliego la posibilidad de que el concesionario sugiera el acondicionamiento de unas instalaciones complementarias a las ya existentes. En este supuesto, la Fundación de Cultura se hará cargo del 75% del coste total del proyecto hasta el límite máximo de importe del canon.
En cuanto al material que se suma a la concesión como parte del centro artístico hay 865 piedras litográficas de las cuales 570 son de propiedad municipal y 295 están en depósito por la familia Viña: 244 para exposición y 51 para su uso. Los materiales sólo para exposición de propiedad municipal son el resultado de la suma de 70 piezas adquiridas por el Ayuntamiento en 1998, otras 470 que fueron compradas en el año 2000 y un paquete de 30 también de 1998 pero compradas por la Fundación Municipal de Cultura, Educación y Universidad Popular. Esa compra municipal supuso la pervivencia del legado de los Viña.
