La diputada regional Elma Alonso y el concejal del Ayuntamiento de Gijón Manuel Pecharromán, ambos del Partido Popular (PP), denunciaron el sábado, en una conferencia de prensa, «el despilfarro de dinero público en Laboral, con el aplauso del PSOE y de sus socios de gobierno de IU». Alonso y Pecharromán esgrimieron, para cargar contra la empresa pública del Principado Recrea, encargada de la gestión de Laboral Escena y del Centro de Arte de Laboral Ciudad de la Cultura, las cuentas del año pasado de ambas. Así, Pecharromán afirmó que «los gijoneses vemos cómo el dinero se lleva a manos llenas» a «un chiringuito socialista donde se coloca a amigos», como definió el complejo cultural.
Por lo que respecta a Laboral Escena, con actividades en el rehabilitado teatro de la antigua Universidad Laboral, Elma Alonso y Manuel Pecharromán afirmaron que el año pasado, con un presupuesto de un millón de euros, se vendieron 5.493 entradas para todos los espectáculos celebrados, lo que reportó una recaudación de 52.422 euros, «con lo que no se llega ni al cinco por ciento del coste total, incluyendo el sueldo del responsable de la programación, Mateo Feijoo, que cobró 136.000 euros», indicó Elma Alonso. Citaron un ejemplo: «El espectáculo «Ertza», del 23 de octubre, que costó 4.434 euros y del que se vendieron tan sólo ocho entradas».
Por lo que respecta al Centro de Arte de Laboral, Manuel Pecharromán y Elma Alonso explicaron que en 2008 se gastaron 3.527.411,72 euros, «y se vendieron 63.105 entradas, que si somos generosos y las multiplicamos por cinco euros, que son las más caras, nos salen 315.000 euros de recaudación». Tras calificar el desfase económico como «una vergüenza», Manuel Pecharromán cifró en 4,5 millones de euros «lo que se gasta en el Centro de Arte y en Laboral Escena, cuando en Asturias ya hay 57.000 familias en situación de pobreza».
También criticó el concejal del Ayuntamiento de Gijón que en Laboral Escena no se haya contratado a ninguna compañía de teatro asturiana, «como se había prometido» y, por último, afirmó que en Laboral «se contrata a dedo».