El Consejo de Ministros prevé aprobar el viernes el fin de la construcción de la EDAR que permitirá iniciar los trabajos de desarenado y desengrasado.
El portavoz popular también ha informado de que el Ministerio de Medio Ambiente recibirá esta misma semana el estudio de impacto ambiental que marcará el futuro de la depuradora.
OFICINA DE COMUNICACIÓN.- El portavoz del Grupo municipal del PP, Pablo González, ha adelantado que el Consejo de Ministros del próximo viernes tiene previsto aprobar el fin del proceso de construcción para liberar la EDAR Gijón Este del contrato con la constructora, la UTE Aqualia-Degremont.
A efectos prácticos, esta medida supondrá que Tragsa podrá acceder a la instalación y poner en marcha labores de pretatamiento, como el desarenado y desengrasado de las aguas.
El popular también anunció que esta misma semana finaliza el plazo para la entrega del estudio de impacto ambiental que el Ministerio de Medio Ambiente encargó a la empresa TAXUS, Gestión Ambiental, Ecología y Calidad y que arrojará luz sobre el futuro de la depuradora.
González subrayó que tras más de 27 años de problemas con el saneamiento de Gijón, el Gobierno del Partido Popular “gestionó una herencia vergonzosa del PSOE” y gracias a este trabajo, Gijón está hoy más cerca de solucionar sus problemas y cumplir con Europa “por lo que no admitimos ni una lección del PSOE en esta materia”.
“El Partido Popular recibió una vez más la peor herencia posible, en este caso un proyecto de depuración caprichoso, sectario e impuesto a los vecinos con el rodillo de tres administraciones socialistas y una vez más, un Gobierno del PP ha demostrado su capacidad de gestión, solucionando el problema”, añadió el popular.
Más de 25 años de problemas
En este sentido, el popular recordó que fue en 1991 cuando tres administraciones socialistas, firmaron el convenio para el saneamiento de Gijón, que ya contemplaba la construcción de dos depuradoras.
En diciembre de 2005, se licitó el anteproyecto para la depuradora del Este y al año siguiente, se contrata el estudio del anteproyecto cuya redacción finaliza en enero de 2008 y es aprobado en octubre de 2009. Todos estos trámites bajo Gobiernos socialistas en las tres administraciones involucradas.
En abril de 2012, con el PP ya en el Gobierno central, la Dirección General del Agua adjudica, por un importe de 36 millones de euros, la obra de construcción de la EDAR Gijón Este, que mejorará la depuración de vertidos de 150.000 gijoneses.
En febrero de 2016, y cuando la obra se encuentra al 90 ciento de ejecución, el Tribunal Supremo ratifica una sentencia anterior de la Audiencia Nacional que paraliza la obra por entender que “faltó motivación y hubo discrecionalidad técnica en la elección del lugar de ubicación de la planta”. Es decir, desautoriza el estudio previo realizado por el Gobierno socialista.
Por último, en septiembre del pasado año, la Audiencia Nacional autorizó, a petición del Ministerio de Medio Ambiente, que dicha planta se usara para labores de desarenado y desengrasado para rebajar el nivel de vertidos del emisario submarino de Peñarrubia.
Toda esta cronología demuestra, en opinión del portavoz popular, que ha sido el Gobierno popular de Mariano Rajoy quien “ha tenido, una vez más, que poner los medios para solucionar una gravísima situación medioambiental generada por la incompetencia de un Ejecutivo socialista”.
