Desde Nuevas Generaciones del Partido Popular de Gijón queremos manifestar nuestra preocupación por la creciente politización del Conseyu de la Mocedá de Xixón (CMX), la cual está alcanzando su máximo histórico en las últimas semanas. Definitivamente, Izquierda Unida ha acaparado la federación de asociaciones gracias a la inestimable colaboración de su presidente, Javier Suárez, el cual ha visto recompensado su esfuerzo en favor de los comunistas, con un puesto dentro de las listas electorales para las próximas elecciones europeas. Esta degradación total de los valores y la imparcialidad del CMX viene de lejos, desde los tiempos en que PSOE e IU gobernaban la ciudad y ponían al frente de esta federación a personas como Jordán (famoso en últimas fechas por otros motivos). Sin embargo, comienza a rozar máximos históricos cuando la federación realiza un acto de Izquierda Unida bajo el paraguas de aparente neutralidad del Conseyu. En dicho acto intervienen el diputado de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, y Javier Suárez en calidad de presidente del CMX para poner en tela de juicio la Ley de Seguridad Ciudadana promulgada por el Gobierno de España. Pero además de la difusión partidista de unas ideas, creemos que en este acto se utilizó a la federación para reforzar la posición de Javier Suárez ante la inminente confección de las listas electorales al Parlamento Europeo por parte de los comunistas asturianos. Es decir, una utilización personalista y vergonzosa de lo que debe ser una federación independiente y volcada al bienestar de las asociaciones juveniles, no un instrumento para que alguien forje su gloria personal.
Por otro lado, nos preguntamos si ahora el Conseyu va a estar al servicio de la campaña electoral de IU como ha estado al servicio de sus políticas durante todo el mandato de Suárez. Si de manera gratuita el presidente del CMX realiza actos públicos para su partido, no nos podemos ni imaginar lo que puede ser capaz de hacer cuando esté en juego un jugoso sueldo en Bruselas para él. Apoyamos y defendemos la participación de los jóvenes en los partidos políticos, así como la asunción de responsabilidades en los mismos. Lo que no podemos tolerar es que para llegar a ellos se utilicen plataformas supuestamente independientes que debieran estar al servicio de todos, lejos de partidismos y sectarismos.
No podemos consentir que el Conseyu de la Mocedá de Xixón continué siendo el trampolín para que unos pocos medren a costa del resto de las asociaciones y los jóvenes que las componen. Por todo ello, exigimos la dimisión de Javier Suárez como Presidente del CMX para que pueda dedicarse plenamente a su carrera política en Izquierda Unida, sin dañar la imparcialidad de una federación de asociaciones juveniles demasiado dañada por la izquierda gijonesa en los últimos años. Si repasamos la gestión de Javier Suárez al frente de la federación, vemos cómo éste ha utilizado la misma con los únicos fines de congraciarse con sus compañeros comunistas de filas y de imponer sus ideas sobre un Conseyu que no está para hacer política, sino para defender los intereses de las asociaciones. Queremos reiterar que nos parece inaceptable que el CMX esté en manos de un partido político y no consentiremos que sea un engranaje más dentro de la campaña electoral de Izquierda Unida.