El Área de la Mujer del Partido Popular de Gijón quiere expresar su absoluto rechazo a la posición que están manteniendo los responsables del PSOE local en el lamentable suceso protagonizado por Iván Raja e Irene Mier, después de que ésta presentara una denuncia por malos tratos.
El Área de la Mujer del PP gijonés comparte plenamente la petición realizada ayer por la concejala Maite Menéndez de que, a la espera de una resolución judicial definitiva, el Partido Socialista suspenda cautelarmente de sus cargos a ambos.
Iván Raja no sólo es ex concejal del Ayuntamiento de Gijón, sino que actualmente ocupa el cargo de secretario de Organización del PSOE local y el de gerente del Centro de Transportes de Gijón. Por su parte, Irene Mier es miembro del comité autonómico del PSOE, vocal del órgano de Gestión de las Escuelas-Taller y Casas de Oficios, representante del Ayuntamiento en el Colegio Montevil y empleada en la empresa Serpa, cuyo responsable es el dirigente socialista Francisco Villaverde.
La respuesta dada por el secretario general del PSOE gijonés, José Manuel Sariego, ante unos hechos que están actualmente en manos de la Justicia, que será la que resuelva si hubo malos tratos o una denuncia falsa, constituye una expresión de la doble moral con que actúan los dirigentes socialistas en asuntos de violencia de género.
Sariego hizo suyas las manifestaciones hechas por el concejal Santiago Martínez Argüelles en este asunto, que pretenden despachar manifestando que “es una cuestión que pertenece al ámbito de lo privado”. Estas declaraciones ponen de manifiesto la hipocresía de los dirigentes socialistas. Cuando se han producido otros casos similares en nuestra región, como el ocurrido al concejal del Partido Popular Alberto Mortera, en el que la denuncia presentada fue desestimada por el juez, los responsables del Partido Socialista, entre ellos la secretaria de Igualdad de la FSA-PSOE y senadora, Carmen Sanjurjo, no dudaron en descalificar y pedir responsabilidades inmediatas de carácter político al denunciado. En aquel caso no hicieron ninguna referencia a que pudiera tratarse de una cuestión personal y privada, argumento que ahora utilizan para eludir las consecuencias políticas del asunto producido entre los dos dirigentes socialistas gijoneses.
El Área de la Mujer del Partido Popular gijonés planteará este caso y las consecuencias que debería acarrear para los implicados, mañana, miércoles 12 de enero, en la reunión del Consejo de Mujeres de Gijón., al tiempo que pedirá un pronunciamiento a las organizaciones que lo forman.